Cuando tienes cáncer en una edad muy temprana ni siquiera piensas en las clases, en aprender a leer o escribir, ni mucho menos jugar en los parques, tu vida cambia por completo.
Me diagnosticaron cáncer, leucemia para ser específicos, a los 3 años, una edad muy temprana, una edad muy propensa para desarrollarlo. Empiezas a cambiar los cuentos, los juegos infantiles, los crayones, las actividades para preescolar por inyecciones, quimioterapia e incluso operaciones.
Durante esa etapa obviamente faltaba mucho a clases, durante mis tres años de preescolar fui pocos días, mis compañeros no entendían porque faltaba mucho y sobre todo porque de repente ya no tenía cabello. Para los niños en etapa preescolar (y seguramente también en otras edades) es muy difícil comprender porque otros compañeros son diferentes y es ahí donde nuestra labor puede ayudar un poco, gracias a mis maestras de preescolar puede terminar la escuela, siempre me apoyaron, me integraban en cada actividad infantil, festivales, convivios a pesar de que iba pocos días, hacían que mis compañeros me trataran con normalidad. Incluso las maestras de Preescolar del hospital fueron de gran ayuda para pasar esta etapa.
Aunque en la primaria fue diferente, los pequeños me hacían más Bullying, pues a esta edad pueden ser más crueles, y a veces era muy difícil seguir el ritmo del grupo. Por eso es importante que desde pequeños se les enseñe a los niños la tolerancia, el respeto y la empatía, no solo en enfermedades como el cáncer sino en cualquier enfermedad o condición, respetar la diversidad. importantísima.
Aquí nuestra labor es importantísima.
Los niños con cáncer luchan cada día por su vida y es deber de nosotras hacer que se sientan más felices y cómodos incluso si solo van muy pocos días, fue por eso que decidí ser educadora porque quiero dejar mi huellita en el mundo y cambiarlo un niño a la vez.
Después de 5 años de tratamiento, inyecciones e incluso una operación a corazón abierto, soy 17 años libre de cáncer, donde después de todo aprendes a ver la vida de una forma diferente, entiendes que las pequeñas grandes cosas son las que al final del día valen la pena.
Miss Né.
